Xavier Losada woont en werkt in Venezuela en hij weet daar, in die relatieve uithoek, het ene na het andere meesterwerkje te maken. Ambulancia Estrellada is een "gesproken woord-project", zoals hij het zelf noemt, dat een enorme meerwaarde krijgt door Losada's arrangementen. Persoonlijk versta ik nauwelijks iets van de teksten (al veerde ik toch even op toen ik, luisterend op de fiets, ineens "bicicleta" hoorde), maar dat maakt weinig uit, ook al lijkt het hier juist volledig om de teksten te gaan. De fraaie, weerbarstige muziek die Losada om die teksten van Bruno Galindo heenbouwt doen denken aan kruiende ijsschotsen en kraakheldere witte winterdagen. Wat vreemd is voor een album dat uit Venezuela komt. Open oren zijn wel vereist, want Losada maakt unieke muziek die je nog nooit eerder gehoord hebt, en hij blijft zoeken naar grenzen. De muziek lijkt dan wel wat weerbarstig, door de heldere, transparante opbouw is het zeker geen ontoegankelijke muziek. Drie fragmenten om een idee te krijgen van de rijkdom van dit fraaie album. Holly Moors / The Moors Magazine ---------------------------------------------------------- Entre los mayores atractivos de la música están el factor sorpresa y las infinitas combinaciones que ciertos músicos pueden lograr a partir de ideas simples. Menos es más, es un axioma siempre valioso. ¿Que puede salir de un encuentro entre un músico venezolano que combina el rock, la electrónica, el jazz y la música académica, y un destacado periodista español revitalizador de la poesía escénica y el llamado “spoken word”?. Las respuestas podrían ser muchas, en especial antes de escuchar el maravilloso contenido de este disco. Xavier Losada y Bruno Galindo son Caracas y Madrid, o al revés, quizá. La Puerta de Alcalá instalada en Altamira, o el Obelisco anclado en la Gran Vía. Un cruce de intenciones, sonidos y palabras transformado en un proverbial matrimonio artístico. No hay aquí falsas imposturas ni excesos innecesarios. Hay, eso si, un cuidado desarrollo en el que instrumentos, voz y textos se conjugan sin traumas. Mientras Bruno desgrana su envolvente y a veces inquietante poesía urbana, utilizando para ello su expresiva voz y algunos efectos, Xavier construye un atractivo andamiaje sonoro. La narrativa de Galindo cuadra a la perfección con la óptica musical de Losada, que ya había intentado en sus trabajos anteriores interpretar la literatura desde el piano o la guitarra y mediante el uso de diversos recursos visuales que juegan con las formas y colores. Aquí ambos potencian su trabajo, creando doce esculturas sonoras cada una con vida propia pero a su vez imbricadas entre si. Esta obra es el fruto de la unión de dos talentos que parecieran conocerse de toda la vida. A veces, sin embargo, las mejores obras ocurren de los encuentros furtivos, casuales o, como en este caso, entre personas separadas geográficamente a las que en algún momento les surge la posibilidad de unir ideas. Hay que celebrar y disfrutar este atemporal intercambio. Juan Carlos Ballesta