Starlin inició en la música muy joven, participando en la parroquia Nuestra Señora de las Mercedes en su ciudad natal Constanza, República Dominicana, donde cantaba y además tocaba los instrumentos de percusión en coros y grupos juveniles. A finales del 2003 empieza a hacer sus primeras composiciones y forma con unos amigos el Ministerio de música “Impactados por Cristo” (2004). Luego se radicó en Santo Domingo formando el grupo ‘‘Klave2’’ junto a su primo Aneury Queliz (2006). A guitarra, piano y voz empiezan a recorrer con un repertorio romántico los bares de la Ciudad Capital donde adquiere una popularidad en los diversos establecimientos que se presentaba, así surge el sueño de querer ser artista y cantar. De repente la experiencia de vivir ese sueño se volvió negativa al estar expuesto a la vida nocturna de los bares y lo que implica este estilo de vida. A pesar de los beneficios y la aceptación del público, su vida cae en un desequilibrio, el cual El lo atribuye a la ausencia de Dios en su vida en ese momento. Un día que no fueron muchas personas al bar, unos amigos católicos se ofrecieron a llevarlo de regreso a su casa y al llegar allí, ellos inspirados por el Espíritu Santo oraron por él. Esa noche empezó un proceso de reconciliación que lo llevo nuevamente a los brazos de Dios, lo inspiro a levantarse y como fruto de este proceso nace su primeras producción musical, un disco con sus composiciones cristianas el cual se llamo ‘‘CristoPop’’ (2011). Una producción discográfica compuesta por 10 temas –todos de su autoría- en géneros musicales diversos, producida en su totalidad por el destacado músico Robert Susana y que contó también con la colaboración de los ingenieros de sonido Luis Mansilla y Arturo Piña en los estudios de Pavel Nuñez. Con el disco CristoPop ha podido llevar a muchos corazones su experiencia personal de fe con varios conciertos en distintos escenarios.